Se basa en la COMPRESIÓN, esto es aumentar la presión de un fluido, generalmente un gas, utilizando medios mecánicos. Todo es susceptible de ser comprimido, incluso los líquidos, pero estos tienen la particularidad que sus moléculas se encuentran más juntas y se hace más difícil comprimirlos por medios mecánicos, un buen compresor de líquidos podría ser la olla exprés que también está en todas las casas, pero eso forma parte de otro capítulo, nos centramos en los gases.
Aunque existen muchas familias tipos y demás, no me voy a extender y separaré al compresor en dos grupos en cuanto a su trasmisión, los de pistón y sus derivados y los de tornillo o sin fines. El ejemplo gráfico no puede ser mejor que imaginar un pistón que aprieta un gas hasta un nivel determinado y sale por una válvula en contra de la presión de descarga.
Cuando aprieto la bomba de hinchar la bici mientras cierro la salida con el dedo creo una presión de aire que una vez retirado el dedo sale con presión al exterior produciendo un trabajo que en este caso es llenar la cámara de la bici y ese sería el ejemplo más sencillo de un compresor de pistón.
El compresor reciprocantes a pistón, es el más utlizado en las neveras de nuestros domicilios a nivel doméstico, pero también el más utilizado por en grandes compresiones a nivel industrial.
Evolucionamos ese pistón con varias etapas, válvulas de admisión de carga y descarga, trabajo reversible y varias etapas, cámaras de compresión, tanques de almacenamiento, etc etc…
En la otra gran familia de compresores, encontramos los de
tornillo, que se simplifican en que producen aire comprimido por un proceso
rotatorio continuo, imaginamos un tornillo sin fin, que gira sobre una base de
ese tornillo excéntrica una vez que el aire ha pasado la admisión se mete entre
las paletas y estas van girando hasta llegar a un punto que como consecuencia
de la excentricidad, estas se hallan muy juntas consiguiendo la compresión del
gas, y abriéndose una válvula de descarga que permite evacuar la presión
generada. El aire se comprime entre sus lóbulos de una forma continua y
progresiva. Para lubricar estos procesos de compresión se utiliza aceite, así en
muchos casos se comprime conjuntamente el aire. Es muy importante que el aceite
tenga la viscosidad adecuada y no sea miscible con el gas comprimido a fin de
que una vez finalizado el proceso de compresión se puedan separar en el
depósito de recogida y no se produzcan arrastres por parte del gas.
Complicamos esto más con compresores de dos etapas con doble rotor y llegamos hasta los compresores scroll que son una variante de los compresores de tornillo donde el trabajo lo realizan dos espirales excéntricas una fija y otra móvil que gira en torno a la otra en uno de los extremos se realiza la admisión de aire y este va circulando por la cámara hacia el interior donde el giro excéntrico le hace compactarse cada vez en un menor espacio, hasta llegar al centro donde se haya la válvula de descarga.
Complicamos esto más con compresores de dos etapas con doble rotor y llegamos hasta los compresores scroll que son una variante de los compresores de tornillo donde el trabajo lo realizan dos espirales excéntricas una fija y otra móvil que gira en torno a la otra en uno de los extremos se realiza la admisión de aire y este va circulando por la cámara hacia el interior donde el giro excéntrico le hace compactarse cada vez en un menor espacio, hasta llegar al centro donde se haya la válvula de descarga.
El compresor scroll es el más utilizado para la compresión y
aire acondicionado por su bajo nivel de ruido y mantenimiento.
omolino